Empezaré por plantear un concepto a mi juicio muy válido. LA MEDICINA ES UNA SOLA y siempre debe propender por generar calidad de vida y calidad de muerte (Entendiendo por esto que ninguna persona debería morir sola ahogada con dolor severo o en condiciones denigrantes).

Teniendo esto claro podemos decir que anteriormente se hablaba de “Medicina Alopática” haciendo referencia al tratamiento de las enfermedades y los síntomas “por el contrario” así por ejemplo si una persona tiene como síntoma dolor se utiliza un Analgésico, si hay signos de inflamación Anti-inflamatorio si presenta Hipertensión Anti-hipertensivo etc.

En contraposición a la medicina homeopática, en la cual se utilizan remedios que en una persona sana producen síntomas que se quieren tratar así por ejemplo en una persona sana que se le suministra Belladona 4 ch empieza a tener la piel roja caliente se siente agitada entre otros hallazgos muy parecidos a los que presenta una persona en un estado febril o con un proceso inflamatorio, por ello en una persona que consulta con estos síntomas se podría utilizar belladona.

Desde el punto de vista normativo el Ministerio de la Protección Social viene trabajando en los últimos años en pro de la normativización de los prestadores de salud en el área de Medicina Alternativa, llevando a las mesas de trabajo del mismo todas las inquietudes de profesionales y usuarios y con la participación de las universidades en especial la Universidad Nacional de Colombia y las sociedades científicas de sus egresados, llegando al consenso de establecer como norma el criterio de “Sistemas Médicos Complejos” entendidos como aquellos que se construyen en torno a cosmogonías o cosmovisiones (Una forma particular de ver y entender la dinámica del universo) y tienen 5 dimensiones básicas estructuradas en términos teóricos y/o simbólicos.

Una Morfología o Anatomía que define la estructura y la forma de organización del cuerpo, una dinámica vital humana o fisiología que define el movimiento de vitalidad, su equilibrio o desequilibrio en el cuerpo, sus orígenes o causas.

Un corpus doctrinario o doctrina médica que define en cada sistema el proceso salud enfermedad, la enfermedad o dolencia en sus orígenes o causas, lo que es posible tratar o curar y lo que no pertenece al cuerpo médico como proceso mórbido o posible de curar (que no es tratable o no tiene “cura” es decir, lo que pertenece o no a la clínica).

Un sistema de diagnóstico, por el cual se establece si hay o no un proceso mórbido, su naturaleza, su fase de evolución y su origen o causa probable.

Un sistema terapéutico que determina las formas de intervención adecuadas a cada proceso mórbido o enfermedad identificada por la dimensión diagnóstica.

Siendo así a la fecha se aceptan como sistemas médicos complejos la Medicina Occidental Moderna o Biomedicina que es la racionalidad médica más aceptada conocida y utilizada a la cual llamamos medicina convencional o medicina Alópata.

La Homeopatía, Las Terapias Manuales donde está como bandera la Osteopatía la Medicina Tradicional China que incluye herbolaria y acupuntura, la Medicina Ayurveda Hindú y la novel Medicina Neural Terapéutica, otros nombres utilizados obedecen a estrategias comerciales que mezclan parte de las anteriores y se fundamentan en sus dimisiones así por ejemplo surgen la Homotoxicología que toma elementos de patología y homeopatía, la Medicina Biológica que toma elementos de biomedicina ecología y homeopatía la medicina Holística la nueva medina germánica y últimamente la medicina funcional.

No debemos perder de vista que el nombre y enfoque dependen de estrategias comerciales de posicionamiento que lideran algunos laboratorios y buscan formar al cuerpo médico en el uso de estos recursos, algunos de ellos milenarios y ancestrales no por ello carecen de validez o seriedad y a pesar de que se trate de minimizarlos llevándolos al límite de llamarlos pseudocientíficos cada día más y con el abordaje desde la investigación cualitativa demuestran su validez y aplicabilidad convirtiéndose en una herramienta muy importante en el manejo y en el mejoramiento de la calidad de vida de muchos pacientes que no han encontrado respuesta con el uso de la medicina convencional únicamente.

Como siempre lo más importante es verificar el proceso de formación y la idoneidad del profesional de la salud que oferta dichos servicios en pro de evitar complicaciones que llevan al descrédito de este importante y prometedor recurso para el manejo de las personas con enfermedades especialmente aquellas crónicas o de muy difícil manejo.

Dr. Jaime Antonio Gallego Jiménez Msc
Lic. Biología y Química.
Médico y Cirujano
Magister en Med. Alternativa Terapia Neural
Magister en Fitoterapia
Experto Universitario en Ozonoterapia y factores Autólogos de Crecimiento Ozonizados